Cortes de pelo verano 2010

Cada vez que llega el buen tiempo, me cuesta lo indecible refrenar las ansias de sacrificar a la tijera esta melena que llevo ya «cultivando» la friolera de cuatro años. La culpa la tiene la costumbre que adquirí de adolescente de cortarme el pelo a la altura del mentón en cuanto se acababan las clases en junio, para no tener que preocuparme de la molesta y engorrosa tarea de desenredarme los nudos causados por los juegos acuáticos en la piscina o la playa.

Era una auténtica liberación, y lo hacía sin pena ninguna, ya que volvía a crecerme a una velocidad pasmosa, y al año siguiente volvía a tenerlo de una longitud considerable. Cuanto más largo lo tuviese, más disfrutaba de lo radical del cambio.

La última vez que hice algo parecido, fue en el verano del 2004. Tenía el pelo bastante largo, a mitad de espalda. Pero como a la mayoría de las mujeres que se está dejando crecer el pelo, toda largura me parecía insuficiente, por lo que le pedí a mi peluquero que me pusiese extensiones para disfrutar de la sensación de tener una melena «pantojil» hasta la cintura. Fue tal el agobio que pasé cuidando de las extensiones, que apenas un mes después volví a la peluquería para pedirle a Tomás (así se llamaba el peluquero), no sólo que me las quitara, sino que me cortara mi preciada melena como en aquellos días de verano adolescentes.

A esa visita a la peluquería siguieron muchas durante dos años, porque el pelo corto es una droga y de las duras, y experimenté asimetrías y colores extraños o arriesgados, como el rosa o el rubio platino, que no hubiese osado probar sobre mi melena larga.

Sin embargo, otra vez volví a sentir añoranza de mi pelo largo. Una añoranza que ni las extensiones más caras lograron paliar, y emprendí la ardua tarea de volver a lucir una melena larga y cuidada.

Pero cada vez que llega el buen tiempo, siento el impulso de hacer una locura. Sobre todo cuando veo fotos de éste corte de pelo, mi favorito, que ya he llevado en tantas ocasiones y con casi todos los colores en los que se puede llevar.

Se trata de un bob sin flequillo, muy apurado en la nuca y más largo por la parte delantera, con mechones vaciados a navaja. Al contrario de lo que pueda parecer, sienta bien a la mayoría de las caras, quita años de encima y es facilísimo de peinar, ya que basta con usar el secador desde atrás al mismo tiempo que se moldean las puntas con los dedos.

Puedes usar un producto de fijación y texturización en las puntas. Mi favorito era la Goma Creativa de Schwarzkopf (nunca sé si he escrito bien esta marca…), que fija como la cera pero es de acabado mate, como si no llevaras ningún producto, y sirve también para crear looks de «recién levantada».

Por su longitud se trata sin duda de un corte de pelo muy versátil, ya que permite recogidos pizpiretos con horquillas o en coletitas, pero también puede llevarse suelto con volumen, en un pulido alisado, o completamente engominado.


Aquí os dejo un esquema de cómo se hace el corte de pelo, para que se lo llevéis a vuestra peluquera en caso de que os animéis a lucir un nuevo look este verano.

3 respuestas a “Cortes de pelo verano 2010”

  1. Yo después de muchos años llevando pelo largo (creo que desde que hice la comunión xD), también tuve mi crisis veraniega, fui a la peluquera sin saber si pedirle que me cortara las puntas o que me lo cortara por la barbilla, al final como era un día de calor me decidí por la segunda opción y acabé encantada!
    Cuando está corto es una maravilla, el problema aparece cuando llegas a ese punto en que no está ni corto ni largo!

    Besos!

    Me gusta

¿Charlamos sobre esto?

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.