Este otoño no hay término medio en lo que a colores de labios se refiere, y las opciones que marcan tendencia oscilan entre los extremos opuestos de los burdeos más atrevidos y los nude más angelicales. Y aunque soy una firme defensora del maravilloso efecto positivo que produce pintarse los labios de rojo, reconozco que a veces no es la opción más indicada, sobre todo para looks más formales o relajados. Por eso esta temporada he decidido pasarme al extremo más suave y hoy quiero mostraros cuáles son las dos barras de labios nude que se han convertido en mis inseparables compañeras. 

Así como no resulta sencillo dar con el tono de rojo de labios adecuado, encontrar el nude que más nos favorece también puede ser una tarea complicada. En mi caso por ejemplo los tonos que tienen al beis me hacen parecer enferma, y los que se acercan demasiado al rosa palo hacen que mis dientes parezcan amarillos.

Afortunadamente he encontrado no una sino dos barras de labios cuyo color me gusta, y por si la dicha fuera poca encima tengo la suerte de que una es en textura mate mientras que la otra es cremosa, por lo que me dan mucho juego tanto juntas como por separado.

La barra de textura cremosa es de Skeyndor. No deja de sorprenderme la calidad de los cosméticos de esta marca. Esta barra de labios es un pequeño tesorito: además de tener un tono tan de tendencia como intemporal posee protección solar de factor 25 y una fórmula antienvejecimiento con propiedades antioxidantes. El sabor, la textura y el olor son muy agradables. En cuanto empiezan a bajar las temperaturas mis labios se resienten y se resecan mucho, así que este invierno no pienso separarme de ella.

La barra de textura mate no podía ser de otra marca que de MAC. Desde que probé la mítica Russian Red estoy totalmente enganchada a su gama de barras de labios mate. Una sola aplicación me dura prácticamente todo el día, y es increíble cómo pigmentan. Como curiosidad os contaré que una vez tras usar el Russian Red hice el típico gesto de besar un kleenex para retirar el sobrante y después tiré ese kleenex al WC; se me olvidó tirar de la cadena y cuando volví a casa mi beso se había quedado estampado en la porcelana del interior del WC, y no os imagináis lo muchísimo que hubo que fregar con la escobilla para que desapareciera.

Como ya os decía antes, son dos barras de labios maravillosas por separado pero también hacen un buen equipo juntas. Nada como aplicar la barra mate como base y luego dar un toque extra de hidratación con la de Skeyndor en el centro del labio para conseguir una boca más jugosa. La barra de Skeyndor es ligeramente más rosada, mientras que la de MAC tira más hacia el tono terracota. En la siguiente foto podéis ver cómo quedan al usarse juntas, y en la última la comparación de los dos tonos aplicados sobre el dorso de la mano.

¿Os apuntáis a los labios nude este otoño? 😉