
Cuando oímos hablar de Las Vegas enseguida nos vienen a la mente los tópicos de las noches de juerga y diversión, de despedidas de soltero con despertares resacosos algo amnésicos o de bodas en las que los novios se visten de Marilyn Monroe y Elvis Presley. Y aunque estos tópicos son totalmente ciertos limitarse a ellos al hablar de Las Vegas es quedarse muy corto.
Esta ciudad, totalmente diseñada para el entretenimiento y el disfrute del juego, es también uno de esos destinos que, gracias a su inigualable cartelera, se convierte en una opción imprescindible para los amantes del mundo del espectáculo. Si tienes algún tipo de relación con el gremio artístico, ya seas mago, actor, acróbata o bailarín, tienes que ir a Las Vegas al menos una vez en la vida. Porque lo que vas a ver allí no lo verás en ningún otro sitio del mundo.
Yo he tenido la suerte de viajar allí en dos ocasiones y aún espero que me queden por delante algunas más. Y aunque ya hayan pasado algunos meses desde la última vez quería aprovechar para escribir en un post una pequeña lista de cosas que hacer por allí que creo que son interesantes.
El motivo de mi primer viaje fue asistir a una edición del World Magic Seminar. El congreso en sí ocupó más del 60% del tiempo que pasé allí, pero aun así fui capaz de exprimir al máximo el tiempo libre y vi bastantes cosas.
Para el segundo viaje reservé plazas en el Shhh Cabaret, tal y como expliqué en este otro post. La experiencia prometía: vuelos directos a Las Vegas por primera vez desde España -solo por este detalle ya merecía la pena viajar con ellos- con entretenimiento a bordo con una tripulación de actores y la presencia de capitanes famosos. La verdad es que los capitanes de mi vuelo -Santiago Segura y José Corbacho- consiguieron que nos echásemos unas risas con una subasta de besos de la que no puedo dar detalles porque lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas. 😉

El hotel concertado para el viaje era el Vdara y me pareció increíble: habitaciones espaciosas, completamente nuevas que incluso tenían cocina y comedor por si en algún momento no queríamos salir a comer fuera. Lo único que lamento es no haber tenido más tiempo libre para disfrutar de la piscina y del jacuzzi. Estaba comunicado con el Bellagio y desde este ya podíamos salir al Strip, la avenida principal. La ubicación era perfecta, pero no tienes que preocuparte si decides alojarte en alguno de los hoteles un poco más alejados porque la mayoría de ellos tienen autobuses gratuitos que te dejan en el mismo Strip y que pasan con bastante frecuencia.
Si vas en un grupo pequeño también compensa moverse en taxi, solo tienes que tener en cuenta un par de detalles: que no se pueden parar taxis en medio de la calle porque te multan -hay que cogerlos en las paradas de las puertas de los hoteles- y que a la hora de coger uno hay que buscar un hotel que esté en el lado adecuado de la avenida en función de la dirección que queramos tomar, porque los cambios de sentido son bastante complicados y hay que dar muchos rodeos, lo que encarecerá el coste de la carrera.
Y ahora sí: te cuento cuáles son las 10 cosas que no puedes perderte cuando vayas a Las Vegas. Leer Más