A la hora de enfrentarnos a una entrevista de trabajo es fácil caer en la errónea actitud de que los demás tienen que aceptarnos tal y como somos. Puede que nuestros familiares y amigos sí tengan que hacerlo, pero ese entrevistador que te está poniendo a prueba no. Y puede que seas de la opinión de que lo importante es ser uno mismo, pero no olvides que probablemente junto a tu currículum el entrevistador tenga también los de otras candidatas igual de preparadas que tú y que además encajen con la imagen de la empresa a la que te quieres incorporar.

Así que si quieres aumentar tus probabilidades de hacerte con el puesto lo mejor es que pongas un poco de tu parte a la hora de trabajar tu imagen para un día tan importante. Respecto al look apropiado para la ocasión tengo pensado planificar más adelante otro post con ideas y propuestas, aunque la táctica de pasar de incógnito por la empresa un par de días antes de la entrevista para hacernos una idea del estilo de las personas que trabajan allí siempre funciona. Mientras tanto puedes echar un vistazo a este post que publiqué sobre el asunto hace algún tiempo.

De lo que hoy quiero hablar es de lo que respecta a la rutina de belleza para ponernos a punto y causar una primera impresión lo más elegante y profesional posible, y es precisamente de eso de lo que trata mi nuevo vídeo para Cosmopolitan TV.