
Soy una de esas personas a las que les encanta envolver regalos. No lo hago particularmente bien, pero disfruto mucho del ritual de preparar un objeto para hacérselo llegar a alguien especial. Lo único malo es que gracias a la fama que tengo de que me gusta envolver regalos, a menudo me acaba tocando envolver todos los de la familia en estas fechas. Lo cual es sinónimo de prisas y un poco de estrés dada la inclinación que tenemos en mi familia de dejar todas las cosas para última hora.
Y como sé lo bien que vienen este tipo de tutoriales en estas fechas, he querido recopilar en mi Cosmoclip de esta semana tres maneras distintas de envolver regalos. Las dos primeras echan mano del reciclaje y son muy sencillas. Pero mi auténtica favorita es la tercera: un verdadero comodín que sirve para regalos de cualquier tamaño o forma, y que me ha sacado del apuro en más de una ocasión. Leer Más