Soy una de esas personas que no sabe vivir sin gafas de sol. En el improbable caso de que se me olvide cogerlas al salir de casa, doy media vuelta inmediatamente. Digo improbable porque la verdad es que, incluso en los días nublados, no soy capaz de salir a la calle sin llevarlas puestas. Tengo los ojos un poco sensibles y me lagrimean a la más mínima si hay un poco de viento, y si el día es soleado directamente es que no soy capaz de mantenerlos abiertos si no es con unas buenas lentes de por medio.

Una de las cosas que más me gusta de las gafas de sol es que son el accesorio perfecto para dar un toque llamativo a looks básicos: el más sobrio de los estilismos en total black puede ganar muchos puntos con unas maxi gafas de ojo de gato en color rojo, por ejemplo. Por eso soy un poco adicta a este accesorio y siempre estoy buscando nuevas marcas y modelos para ampliar mi colección.

Y hoy precisamente quiero hablaros de una de estas marcas que acabo de descubrir hace poco, Clandestine. Podría contaros únicamente que las gafas de sol de Clandestine están fabricadas con materiales de alta calidad y máximo confort y que sus lentes polarizadas se encargan de cuidar y proteger nuestros ojos de forma adecuada, y ya con eso tendría motivos de sobra para recomendarlas. Leer Más