Lo siento, no puedo remediarlo: me encanta Blanco. Puede que la calidad de sus prendas no sea precisamente el rasgo más caracterísitico de la marca, pero me gusta poder elegir entre tantas versiones de las últimas tendencias a un precio más asequible, que no deje temblando y maltrecha a mi pobre tarjeta de crédito.

Y me gusta mucho cómo han presentado su lookbook para este verano, con esos fondos tan cítricos y refrescantes (siempre me ha parecido que el color naranja desprende una energía contagiosa).

Obviando los vestidos navy, que al igual que los prints de leopardo ya empiezan a ponerme nerviosa, me quedo con las distintas versiones de vestido cortito en color crema. Con complementos en color cuero se convierte en una opción perfecta para casi cualquier hora del día. Tampoco podemos olvidarnos de los vestidos con estampados de flores, imprescindibles esta primavera para combinarlos con esa cazadora denim que estás a punto de rescatar del rincón del olvido de tu armario.

Y parece que ni siquiera el calor veraniego nos hará aparcar las blazers, que se combinan en el lookbook de Blanco verano 2011 con shorts. Pero con lo que no comulgo es con la moda de llevar los peep-toes o las sandalias con calcetines. No podría permitirme ese lujo después de todo lo que me he reído del uniforme de los turistas que lucían sin pudor chanclas con calcetines Nike.

Te dejo con el lookbook completísimo, tómate tu tiempo y haz clik en las imágenes si quieres verlas a tamaño completo.