Llevamos una buena racha de bodas secretas o sorpresa por parte del famoseo internacional, de esas de las que apenas se filtran un par de fotos borrosas hechas desde lejos o con algún teléfono móvil, y que no nos permiten cotillear deleitarnos en condiciones en los detalles del secreto mejor guardado de la ceremonia: el vestido de la novia.
Y ahora que por fin salen a la luz las fotos oficiales de la última de estas bodas secretas, la de Justin Timberlake y Jessica Biel, en lugar de alegrarme por la novia me ha embargado una profundísima pena por ella. No porque la elección del vestido no haya sido acertada, que a mí de hecho me ha parecido de lo más original, sino porque lo que no ha sido un acierto en esta boda ha sido el novio.
A ver, Justin Timberlake, da gracias a todos los santos de que no era conmigo con quien te casabas, porque habría batido algún récord pidiéndote el divorcio apenas unas horas después del enlace. Concretamente nada más terminar la sesión de fotos para la revista People. Toma nota, chaval: cuando una mujer se decide a llevar un vestido ROSA de alta costura el día de su boda es porque necesita un poco de atención. Lo último que quiere es que su recién estrenado maridito le robe todo el protagonismo de la portada de turno saltando con cara de poseso mientras ella queda relegada a un tímido y discreto segundo plano.
Jessica Biel nunca ha sido muy de acaparar flashes en general, pero de ahí a que ni siquiera en su gran día pueda disfrutar de su merecido protagonismo hay un trecho. Pobrecita, miradla ahí, sentada en el suelo con resignación mientras se le arruga su Giambattista Valli de muchos miles de dólares.
Yo creo que preferiría casarme con Justin Bieber que con Justin Timberlake… no tengo ninguna duda. Y mira que es grave lo que acabo de decir.
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Es que hasta Justin Bieber es mejor que esto… En serio, yo soy Jessica Biel y hago una locura…
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Este chico me caía bien, pero la portada de la revista me parece un desperdicio, tal y como tú dices, déjale a ella el protagonismo, que va preciosa con cualquier cosa que se pone…. Que vale que él sea divertido, pero déjalo para tu intimidad con tu mujer, no nos avergüences a las demás.
No aprenderán nunca…
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Claro, y todo el mundo sabe que el día de la boda la que tiene que llevarse todas las miradas es la novia. Pobrecilla.
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Jajajaja q bueno, bruji!!!!!!
Si es que cada día me gusta más leerte!!!!!
DE 10!!!!
Y sí, elegir ese vestido, gastarte una pasta, PONÉRTELO, y q tu marido se ponga a dar saltos delante de la cámara es, por lo menos, para matarle… luego ya le rematas con el divorcio.
Y luego ya la afirmación de Azu LadyChena sobre su boda con Justin Bieber me acaba de alegar la noche!!!!
Q grandes sois!!!!!
Mil besos y el mejor finde
A
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Buen fin de semana para ti también guapísima, y muchas gracias por tu comentario. 🙂
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Gracias tocaya! Eres mú grande 😀
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Con Justin Bieber Ladychena???? Estás segura?????
Ay! eso es como el que va a buscar traje de novio y se compra el traje con levita blanco, o champang…eso, ahí y tu novia tan contenta!!!
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Azu yo conocemos a uno del estilo de Timberlake, que el día de su boda quiso llevarse todo el protagonismo y se presentó con un traje marrón y con un chaleco de flores doradas. Era horrible, pero muy llamativo. Y la pobre de la novia, que llevaba un traje de Pronovias de los más sencillitos, quedó todo el día en un segundo plano. Hay que ser malaje.
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Mira, que esto de responder a unas y otras en los comentarios de un blog es muy difícil.
Esa primera respuesta era para Chic and Health. Sobre lo del cateto de flores doradas en el traje marrón… he visto cosas casi peores, que pone él en su Facebook, pero como está feo cotillear (y aquí nos lee todo el mundo) mejor no las cuento y nos quedamos con la anécdota del chico que quiso ser princeso. 😛
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No, no estaba segura… qué miedo me ha dado al replanteármelo con tu pregunta :O
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jajajaja, jo, pues a mi ella me parece un algodón de azucar!! 😀 de Justin no hablo, que es harina de otro costal…
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Acabo de descubrir tu blog y me encanta 🙂
Bueno, pobre Justin, podía ser peor… Mira el empeño que puso la mujer de Farruquito en llamar la atención en la boda y nada, con tantas camisas de colores brillantes de los invitados, te deslumbrabas y ni la veías. Por lo menos él no ha recurrido a una camisa de raso fucsia brillante
Besos
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Hola Mav, bienvenida! 🙂
Tienes toda la razón, la boda de Farruquito es otro ejemplo de una situación en la que la novia tiene poco que hacer. Qué injusto, verdad?
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Bueno, otra nueva por aquí! La verdad es que yo no sé si me divorcio o me quedo viuda, jaja!! Pero vamos, qué poca consideración…pa matarlo!!
Besos
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