Sencillamente exquisita, es el único apelativo que me parece que describe con exactitud la maravillosa colección otoño-invierno 2011/2012 que Elisa Palomino presentó la semana pasada en Cibeles Madrid Fashion Week.
La diseñadora ha encontrado la inspiración para su colección Bosque Sagrado en una geisha y actriz japonesa, Sada Yacco, cuyos kimonos sirvieron también de inspiración para Paul Poiret allá por 1900.
Tejidos como la seda o el raso eran los protagonistas en vestidos de aire romántico cortados al bies, aunque también pudimos ver toques de terciopelo y mohair. Colores suaves y empolvados para una colección sutil y sofisticada.
La puesta en escena fue de sobresaliente: las modelos, más que desfilar, parecían deslizarse suavemente por la pasarela envueltas en esos maravillosos vestidos ondeantes. Elisa Palomino supo mantener a los asistentes embelesados hasta el último momento.
Mención especial para el maquillaje y la peluquería, muy teatral. Me encantó.
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La bruja con tacón de aguja 
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