Belle, la marca de cosmética de los supermercados Eroski, se acaba de apuntar a la tendencia de las gamas capilares a base de aceites esenciales que tan de moda están desde hace algunos años —y que tan bien nos vienen a quienes tenemos el cabello un poco seco, ya sea por culpa del secador o de los tintes—.

Como muchas me preguntáis en vuestros mensajes y correos por el tono de tinte que llevo ahora, aprovecho para contestaros aquí y recordaros que llevo dos años sin teñirme. En primavera del 2014, tras dos años de llevar el pelo de un rubio casi platino como el que podéis ver en estas fotos, estaba cansadísima de ser esclava de los continuos retoques de raíz. Porque mi base natural no es oscura, pero el pelo me crece tan deprisa —y yo soy tan tiquismiquis con el tema de la raíz— que me pasaba la vida retocándome el color.

Así que hace dos años decidí que ya estaba bien de teñirme tanto sin necesidad, y durante unos meses me di baños de color para oscurecer un poco la melena y que se fuera igualando todo con mi cabello natural, mientras iba cortando a medida que crecían las zonas más decoloradas.

El resultado dos años después es que parece que llevo californianas, pero es algo totalmente fortuito. Lo que ocurre es que el cabello hasta algo más abajo de los hombros es mi cabello, sin teñir, y el resto es lo que aún queda que previamente estuvo muy aclarado. Y aunque el largo del cabello que tengo sin teñir está bastante sano, las puntas las tengo muy secas por culpa de tantos años de tinte. Y como toda hidratación extra se agradece, estuve encantada de aceptar la propuesta cuando hace unas semanas me ofrecieron probar la gama Oro Mágico de Belle.

La gama consta de champú, mascarilla y aceite capilar. Tanto el champú como la mascarilla tienen principios activos muy similares, que incluyen aceite de argán, aceite de jojoba y queratina. Todos los productos de la gama han sido dermatológicamente testados y ninguno de ellos contiene parabenos.

El champú (1,95€, 400 ml.) es muy denso y emulsiona de maravilla. Con una cantidad casi ridícula de champú tenemos espuma suficiente para lavar nuestra melena. La mascarilla (2,75€, 300 ml.) también es muy densa. Esta densidad hace que sea un poco más difícil extenderla bien por el cabello, pero yo prefiero mil veces eso a encontrarme con una mascarilla demasiado líquida que se me resbale y se me vaya por el desagüe de la ducha en cuanto me la pongo.

Una de las cosas que más me ha gustado de este combo de champú y mascarilla —aparte del precio, que para alguien que gasta tanta mascarilla como yo al cabo del mes es de agradecer— es el olor. Todos los productos de la gama tienen un olor que a mí me recuerda al aceite de monoï que llevan algunos productos solares, y que me transporta automáticamente a los recuerdos de las escapadas veraniegas.

Usando el champú y la mascarilla el pelo me queda suelto, muy suave y nada apelmazado. Puedo desenredarlo con mucha facilidad. La única pega que se me ocurre es que, como tengo las raíces grasas, no consigo que me dure limpio tres días seguidos —algo que solo consigo con otros champús más astringentes, como el de Klorane a la quinina—, y me toca lavarlo día sí, día no.

Me guardo para el final del post el que se ha convertido, no ya en mi producto favorito de la gama, sino en mi producto capilar favorito de toda la temporada: el aceite capilar (5€, spray de 100 ml.)

Desde hace varios años el trono de los aceites capilares de mi neceser lo ocupaba de forma indiscutible el de Nuxe, pero este de Belle acaba de destronarlo. Además del aceite de argán y de jojoba que comparte con el champú y la mascarilla, este tercer producto incorpora aceite de cyperus para dar un plus de suavidad y sedosidad a nuestra melena. Puede usarse tanto sobre cabello seco como sobre cabello mojado, y por supuesto, huele tan maravillosamente bien como el resto de productos de la gama. Porque precisamente uno de los puntos débiles del aceite de Nuxe es el perfume, que puede resultar demasiado cargante para algunas personas.

Con la fragancia del aceite de Belle pasa justo lo contrario: es tan agradable que me dan ganas de tener la nariz todo el día pegada al bote. Y como además este aceite tiene protección solar, intuyo que vamos a convertirnos en inseparables este verano.

¿Conocíais esta nueva gama de Belle? ¿La habéis probado?